El candidato republicano a la presidencia, el expresidente Donald Trump (2017-2021), y su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, continuaron este domingo librando una maratónica batalla por un puñado de estados ‘bisagra’ determinantes, a dos días de las elecciones presidenciales, con encuestas que presentan un escenario muy ajustado.
Trump se centró en sembrar dudas sobre el sistema de votación en algunos estados claves, algo que podría desembocar, como en 2020, en un nuevo cuestionamiento de los resultados, mientras que Harris dijo que en los próximos días “nos van a poner a prueba”.
Este reñido pulso hace que ambos rivales políticos se hayan volcado estos días finales en los siete estados ‘bisagra’: Pensilvania, el que más votos electorales aporta (19); Carolina del Norte (16), Georgia (16), Michigan (15), Arizona (11), Wisconsin (10) y Nevada (6).
Trump: no tendría que haber dejado la Casa Blanca
El maratón de mítines de Trump comenzó esta mañana en el condado de Lancaster, Pensilvania, territorio del grupo religioso, pacifista y tradicionalistas de los amish, para pedir el voto en una comunidad que no suele participar en las elecciones, pero que el republicano espera que vaya a las urnas y con ello obtener el margen necesario para ganar este estado clave.
En su mitin en Lititz, Trump también volvió a reiterar sus dudas, hasta el momento infundadas, sobre que el proceso electoral no esté siendo fraudulento, y aseguró que habrá problemas sobre la legitimidad de los resultados electorales si el escrutinio no se sabe la misma noche del martes.
El candidato republicano dijo que no debería “haber dejado” la Casa Blanca después de perder las elecciones de 2020, derrota que nunca reconoció.
También criticó a los medios de comunicación y sus “noticias falsas”, así como al sistema de votación en Estados Unidos, al quejarse de que en algunos lugares del país no se tiene que mostrar un documento de identificación antes de votar y del tiempo que lleva contar los votos.
“El mundo se ríe de nuestro sistema electoral”, anotó el magnate en su acto de campaña en el estado más crucial de estas elecciones presidenciales del próximo martes.
Harris: los próximos días nos pondrán a prueba
Por su parte, Harris viajó a Míchigan, donde alertó de que en dos días se decidirá el destino de la nación, y expresó su convicción de que el país está listo para “pasar página” y “escribir el próximo capítulo de nuestra historia”.
En una iglesia afroamericana de Detroit, Harris, quien ya emitió su voto por correo, aseveró que “el camino por delante no será fácil” en los próximos días y que “seremos puestos a prueba”, pero que la nación “está lista para doblar el arco de la historia hacia la justicia”.
Por su parte, el expresidente Barack Obama hizo un parada en Milwakee (Wisconsin) para pedir el voto a las minorías latina, negra, judía y árabe, y les cuestionó: “¿Por qué pensar que la respuesta es votar por una persona que tiene una larga historia de despreciar e ignorar a sus comunidades?”, en referencia a Trump.
La media de encuestas recopiladas por FiveThirtyEight muestran empates técnicos y dentro del margen de error entre Trump y Harris, con lo que la victoria podría quedar determinada por márgenes muy estrechos o requerir recuentos.
El exmandatario contaba este domingo, según ese portal electoral, con una ventaja dentro de los márgenes de error en Carolina del Norte (1 %) y Georgia (1 %), mientras que Harris tiene una ligera ventaja en Míchigan (1 %) y Wisconsin (1 %). En Pensilvania y Nevada, mantienen un empate. En Arizona, la ventaja de Trump es hoy del 2,5 %.